Tensión en el Concejo: careo entre Galeano y agentes municipales por denuncias de abuso verbal
El conflicto, originado en un operativo vial, fue tratado en el recinto. La presidenta del Concejo pidió evitar difamaciones y garantizó un análisis imparcial de los hechos.
Tras una semana en que el tema estuvo en el centro de la agenda política, el jueves por la noche se produjo un careo entre la concejal Lina Galeano (Juntos por Entre Ríos) y los tres inspectores de Tránsito con los que mantuvo un enfrentamiento.
“Garantizamos el respeto mutuo, la claridad de los hechos y la legitimidad de las decisiones tomadas en el recinto, reforzando de esta manera la confianza pública en la institución legislativa”, fueron las palabras con que la presidenta del Concejo Deliberante, Diana Baccaro, dio inicio a una instancia de conciliación.
Una vez reproducida la denuncia de los agentes municipales y compartida la defensa que realizó por escrito la edil de la oposición, dejando plasmadas ambas versiones de los hechos, se pasó a un cuarto intermedio en el que se limaron asperezas.
“Demostramos a la ciudadanía que el proceso no es arbitrario ni apresurado, tomando las medidas para garantizar un justo análisis: todos deben basarse en los hechos y evitar expresiones difamatorias o injuriosas”, advirtió a ambas partes la viceintendenta, instándolos a ser “ordenados” y “respetuosos”.
Contenido de la denuncia
El asunto ingresó al recinto a través de una nota del secretario de Asuntos Legales e Institucionales de la municipalidad, Miguel Ángel Federik, dirigida a la presidencia del cuerpo.
“Me dirijo a usted adjuntando copia de lo manifestado por la directora de Tránsito y Educación Vial, Alejandra Araujo, relativo a un informe manuscrito de fecha 11 de noviembre, suscripto por los inspectores Carla Florencia Pruzzo, Enzo Faust y Daniela Gamarra, en el que se alude a una presunta conducta indebida de la concejal Galeano, toda vez que es atribución de este Concejo y su digna presidencia como órgano encargado de meritar y juzgar la conducta de sus miembros y si así correspondiere”, comenzaba diciendo el documento remitido desde el Ejecutivo.
Pasando al contenido del informe de Tránsito, se reprodujo lo siguiente: “Siendo el 31 de octubre del corriente, nos encontrábamos trabajando de recorrida cuando se recibe una denuncia sobre un camión con acoplado estacionado a la izquierda y en un lugar prohibido para descargar”. Al llegar al punto indicado, “se encuentra dicho rodado y se toca varias veces el silbato, solicitándole al chofer del mismo que lo retirara y a su vez requiriéndole licencia de conducir, tarjeta verde y seguro del vehículo, a lo cual se niega rotundamente, insultando a los inspectores actuantes”. Frente a ello, se realizó una constatación y, al dirigirse hacia calle Sarmiento, “sale una señora a los gritos de un domicilio, insultándonos con agravios hacia nuestra persona, tratándonos de negros, que en vez de estar haciendo puesto en el centro, deberíamos permanecer en esa esquina de Pedro Goyena y Sarmiento”.
“Los insultos nunca pararon, siendo esta mujer avalada por el señor Mendizabal, mientras el camión fue retirado del lugar realizando un acta correspondiente con el dominio”, dejaron asentado los agentes, quienes sostuvieron que “la señora indicada es Lina Galeano, concejal”.
Descargo, por escrito
Tal como había anticipado en la sesión anterior, Galeano presentó un descargo por escrito, el cual fue leído mediante la secretaría del cuerpo legislativo.
“Fui notificada por medio del Concejo Deliberante que la Secretaría de Asuntos Legales e Institucionales dio trámite a una nota presentada en forma manuscrita, de fecha 11 de noviembre, donde aluden y me acusan sin prueba alguna de una supuesta discusión, elevada de voz y agresión verbal”, evocó la edil, al dar su versión de los hechos de manera oficial.
“Niego y no es cierto que haya protagonizado tal discusión a los gritos en el ejercicio de mis funciones”, sostuvo. “Niego y no es cierto que en ejercicio de mis funciones haya agredido verbalmente”, prosiguió, insistiendo en su postura. “Niego y no es cierto que el señor Mendizabal avale tal situación”, desmintió luego.
“Por el contrario”, afirmó, “no soy de las personas que se caracterizan por efectuar dicho comportamiento, más aún siendo concejal electa por el pueblo y que en el ejercicio de mis funciones no incurrí en ninguna conducta indebida”.
Dirigiéndose a sus pares, solicitó que el cuerpo “desestime esta acusación, sin más trámite, ya que bajo ningún aspecto permitiré que por nota y sin prueba alguna se intente avasallar contra mi dignidad, honor y persona, dejando expresa reserva de iniciar las acciones penales que por derecho me correspondan contra las personas que me acusan injustificadamente afectando mi reputación, bien jurídico protegido por el Código Penal Argentino y la Constitución Nacional”.
Acercamiento entre las partes
Si bien ambas posiciones parecían irreconciliables, tras un cuarto intermedio que se extendió por casi 30 minutos se arribó a un entendimiento, que dio por finalizado el conflicto.
“Tanto la directora de Tránsito como los tres inspectores aceptaron las disculpas, ya que hablaron entre ellos y se entendieron”, comunicó Baccaro, quien instó a que “este desafortunado hecho nos lleve a la reflexión como ciudadanos y nos respetemos entre todos, siguiendo adelante como una sociedad civilizada y honesta”.
“Agradezco mucho que todo haya transcurrido en el marco del más absoluto respeto, tanto por parte de la concejal Galeano como de los agentes de Tránsito”, destacó.
Otro episodio, mismos protagonistas
Transcurrido el cuarto intermedio y concretado el acercamiento entre las partes, se dio lectura a la respuesta al pedido de informes formulado por el pleno del Concejo al Departamento Ejecutivo en la sesión anterior, respecto a otro episodio que habría tenido como protagonistas a Galeano e inspectores.
“De acuerdo a la documentación obrante, en el acta de constatación de fecha 21 de septiembre se consigna que una persona elude operativo de tránsito, poniendo en peligro la integridad física de los agentes actuantes, dándose a la fuga a gran velocidad”, reza la contestación oficial.
Según el escrito, las características del vehículo y su chapa patente señalan la propiedad registral de Lina Galeano. “Es importante destacar que hemos visto declaraciones de la edil señalada, en las que manifiesta que ella había vendido el rodado”, se hacen eco en la réplica, en base a lo transmitido por ella a través de las redes sociales. Al respecto, y de manera irónica, se señala que “lamentablemente, nuestro cuerpo de inspectores está capacitado para cumplir con las responsabilidades a su cargo, más no han adquirido el don de la clarividencia, por lo tanto ante un hecho de estas características es imposible determinar la identidad del conductor, por lo que la única alternativa de identificación del responsable aparente del acto es el informe del Sistema Simat de la Agencia Nacional de Seguridad Vial dependiente del Ministerio de Transporte de la Nación y del Registro de la Propiedad Automotor”. De ambos organismos “surge que la titularidad registral del vehículo es de la concejal Galeano” y “todas las actuaciones figuran a nombre del vehículo de la señalada, inclusive el pago de la infracción, sin que se haya hecho reclamo alguno que permita dilucidar la situación”.
Analizando los ítems de la línea de tiempo esbozada, desde el Ejecutivo marcaron: “De último momento, hemos podido averiguar que casualmente la denuncia de venta del automotor en cuestión fue el jueves pasado, es decir 62 días después de la infracción y coincidiendo con el conocimiento público del hecho”.
“Es importante destacar que si el automotor fue o no vendido es algo absolutamente desconocido para la administración y la supuesta operación es solo conocida por los participantes de la misma, no siendo pública para terceros hasta la modificación registral que así lo indica, por lo que con respecto a esta situación no hay más que informar ratificando la total corrección y cumplimiento de los deberes a cargo del personal municipal”, dejaron aclarado.
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